Netflix, la empresa líder en contenidos streaming ha aunciado recientemente una nueva política interna de permisos de maternidad y paternidad. Esta política de empresa proporciona a los empleados de Netflix flexibilidad laboral total durante el primer año tras el nacimiento de un hijo. Esta metodología empresarial refleja una cultura de libertad y responsabilidad que asume que sus empleados no tratarán de abusar de la empresa para la que trabajan y por tanto, asume que sus empleados son lo suficientemente maduros como para combinar correctamente sus necesidades personales con los objetivos de la empresa.
FLEXIBILIDAD LABORAL EN ESPAÑA
Resulta inevitable cuestionarse si sería posible que la empresa para la que trabajamos en España estableciese un sistema similar. Es un tema controvertido ya se corre el riesgo de que se den innumerables casos de abuso por parte de los trabajadores y exprimiesen esta política empresarial en perjuicio de la empresa. Sería interesante conocer hasta qué punto las empresas para las que trabajamos en nuestro país realiza un enfoque moderno de este tipo en cuanto a la relación con sus trabajadores. No obstante, hemos de ser conscientes de que el talento, aunque en ciertas ocasiones no es valorado como se merece, resulta que es un recurso escaso y digno de ser apreciado.
Los responsables en las empresas españolas deben ser conscientes de la necesidad de valorar y retener el talento y para ello, es fundamental asumir que los trabajadores son responsables y que ofrecer un buen rendimiento a la empresa se encuentra dentro de sus intereses.
HACER MÁS FÁCIL LA VIDA DE LOS TRABAJADORES PARA AUMENTAR LA EFICIENCIA
Este tipo de política empresarial expresa que la empresa valora y se preocupa por sus trabajadores y tiene interés en retener el talento que ya posee y que seguramente no le ha sido sencillo captar. Para hacer de esta política empresarial una medida eficiente, resulta inevitable establecer un sistema de seguimiento de los resultados logrados por los trabajadores, dejar que trabajen como quieran mientras consigan los objetivos planteados con la máxima eficiencia en lugar de establecer un sistema autoritario de estrictos horarios, que con total seguridad se verá reflejado a la larga en una desmotivación de los trabajadores.
Estos sistemas modernos no se terminen de establecer en las PYMES pero si son más evidentes en grandes empresas donde por regla general los trabajadores son valorados como uno de sus activos más importantes y suelen competir entre ellas para captar y atraer el talento. Por desgracia, mi sensación es que en la mayoría de PYMES predomina la hostilidad y ven este sistema de horarios flexibles como algo raro e inviable y siguen tratando a sus trabajadores como a niños a los que inundar de reglas. Esa mentalidad está probablemente reduciendo su capacidad de acceso al talento y reduciendo su viabilidad